Mark Twain definió a la Isla de Ometepe como ” dos pirámides que salen bellísimas del lago de Nicaragua y que reposan en el agua” en su viaje a Nicaragua, un país del que solo contó (en misivas encontradas posteriormente) la magnificencia de las bellezas naturales del país. Corría el año 1886 y los espacios naturales de Nicaragua siguen impresionando a todos los viajeros que viajan hasta allí.
Isla de Ometepe será el lugar que visitaremos en nuestro sexto día de viaje en nuestro viaje especial a Nicaragua en Semana Santa, con salida el 27 de marzo. Un viaje de fábula, muy completo y con un 5% de descuento en el precio si reservas antes del 31 de enero.
Pero volvamos a Ometepe, una isla paradisíaca de 276 kilómetros que alberga dos volcanes unidos entre sí por un itsmo dentro del Lago Cocibolca (o Gran Lago de Nicaragua), lo que la convierte en la isla volcánica más grandes del mundo de las que se encuentran dentro de un lago.
Su nombre en náhuatl es Ometepetl, cuyo significado es “dos montañas”, algo que retrata justamente a Isla de Ometepe ya que la misma está constituida en su práctica totalidad por los conos de dos volcanes: el volcán Concepción (con una altitud de 1610 metros) y el volcán Maderas, considerado extinto y en cuyo cráter encontramos hoy día la Laguna de Maderas. Ascender hasta ella a través de la reserva natural es todo un espectáculo para los sentidos.
Justo en el centro de la Isla de Ometepe, entre el volcán Concepción y el volcán Maderas, en nuestro viaje a Nicaragua visitaremos el Ojo del Agua, un ecosistema virgen de aguas cristalinas, curativas y refrescantes rodeadas de exuberante naturaleza: monos carablanca, garzas, chocoyos, urracas, un jardín botánico con variedad de plantas medicinales, árboles frutales, bosque, especies nativas …
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